La verdad es que uno no sale de su asombro leyendo algunas de las propuestas electorales. Al verlas pienso que lo mejor que puede ocurrir es que no cse umplan los programas electorales.
Hoy, algunas propuestas de Gallardón. Según La Razón: "Gallardón promete más Movida" - "Un centro de creación, más ayuda a los artistas y llenar de contenido la noche madrileña", entre las apuestas. Según El Mundo: "Gallardón quiere que la cultura sea gratis" - El candidato propone entradas gratuitas o fuertemente subvencionadas aunque no dice cuántas ni en dónde. Busca la universalización de la cultura. Según El País: "Gallardón se compromete a ampliar la oferta artística nocturna" - El candidato popular promoverá el teatro infantil.
Entresaco del texto de las noticias algunas de las frases del alcalde como: "crear una Oficina de Proximidad Cultural, desde donde se buscará una nueva complicidad directa entre el ciudadano y las artes", "respetar la libertad creativa" e impulsar "una política cultural cercana".
¡Qué sarta de tonterías! Me parece a mí que la cultura más próxima a los ciudadanos sería aquélla que los ciudadanos eligieran libremente sin necesidad de un intermediario tan listo y tan culto como el alcalde o como su concejala Alicia Moreno. Aquélla en la que unos ciudadanos libres, artistas y empresarios, proponen obras de teatro, películas, música para que los disfruten el resto de los ciudadanos de forma libre. Frente a este modelo de libertad, el alcalde propone uno en el que él elija por nosotros lo que más nos va a gustar y lo pagará con nuestro dinero, por supuesto. Las propuestas que más me han gustado han sido "llenar de contenido la noche madrileña", esperemos que no la quiera llenar de un contenido luminoso, y la Oficina de Proximidad Cultural.
Lo malo no es eso, sino que Esperanza Aguirre ayer decía que vigilaría que las mujeres promocionen en las empresas.
Casi prefiero las propuestas de Sebastián que, según La Razón, ya están hechas. Eso sí que son propuestas baratas de hacer.
Todo son propuestas intervencionistas, incluso las de los políticos del PP. Al final voy a tener que hacer caso a mi amigo Daniel y no votar a Gallardón. Pero el de la decisión del voto es un tema para otro día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario